Despertad, queridos príncipes...
Ya sé que hace frío
y que el calor de los abrazos
cesó la pasada primavera.
Y que hay color negro,
y ventanas que se cierran,
y mucho silencio en vuestras vidas...
Pero creedme cuando os digo
que existe un lugar donde
el amor ya no es una quimera,
y que jugaremos a ganar
en esta loca aventura de la vida.
Sólo hace falta que le cantéis
a vuestros corazones la vieja nana
que entonábais de pequeños.
Mis pequeños príncipes...
Despertad al sueño.
(fragmentos de "Intro" y "Halcón nocturno")
(c) ISIDRO R. AYESTARAN, 2009