
¿Te apetece fumarte un último pitillo conmigo?
Es que no quiero irme solo a mi casa,
con este aroma a silencio impregnado
en la piel... con este escaso eco
de las voces que oigo a lo lejos,
empapándome de noche,
empapándome de un derroche
de maldita soledad.
Ven, en este portal estaremos a
resguardo de quien nos pueda mirar,
por si te molesta que te vean conmigo,
por si hablan más de la cuenta,
por si se van de la lengua
al decir que te oyeron hablar con
el poeta loco falto de metas,
en busca de un último aplauso
o de un segundo de compañía
bajo la mirada atenta de las estrellas,
a la luz de la luna.
Y es que verás...
Yo tan sólo quería ser protagonista
de tantas cosas... a tu lado, si me dejas,
porque desde la primera vez que te vi
mi hiciste perder la cabeza,
sobre el escenario, atenta a mi
manera de recitar mis poemas,
de declamar lo que realmente le
falta a mi vida desde este otro lado
del espejo hecho añicos...
Donde la ausencia del calor,
la extrañeza de una voz al oído,
me hicieron cantar a la noche un
himno poético sobre la madrugada,
un alarido punzante... sin necesidad
ya de fingir un determinado tono de voz.
Pero sólo si tú me dejas,
porque desde la primera vez que te vi
ya me hiciste perder la cabeza
pensando que serías para mí,
y que ese brillo especial en tu mirada
susurraría a lo largo de la noche
el título de nuestra historia,
para perdernos juntos, más allá
de esta soledad que me rodea.
Es lo único que te quería decir:
ser a tu lado el protagonista de tantas cosas
desde la primera vez que te vi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario